Quaid no pudo hacerse cargo de la hipoteca y no finalizó la historia. Ahora, se encuentra sumergido hasta el cuello en una playa del atlántico océano en busca de la involución que le otorgue la felicidad.
Qué guay el fin de Quaid. ...Que se anime, a ver si un día vuelve a tiempo y le da vidilla al tintero, que luego se caduca y la pluma no se desliza igual untándola en escupitajos de calamar.
Aún no había llegado al umbral de la adolescencia, apenas estábamos en el portal de la preadolescencia cuando el tío de mi vecino Manuel se acercó y nos preguntó. -¿Qué es lo que más os gusta de la vida? Mis amigos respondieron casi al unísono y sin tiempo para masticar la respuesta. -¡Los coños! Yo me tomé mi tiempo para afirmar sin rubor. -El olor a viejo de un libro mil veces releído y tu reloj de oro. En ese momento me di cuenta de que quería ser escritor. No tardé ni unas horas en entrar en la librería de mi barrio para llevarme un ejemplar de Cuentos sin plumas, una pluma estilográfica y una pitillera de plata. Era increíble la facilidad que tenía Fermín, el librero de mi barrio de 78 años, para correr tras mis pasos. Durante mucho tiempo se convirtió en un referente para crear mis historias más exitosas y mis personajes con mayor riqueza: “Las rosas rojas y sus collares de perlas”, “El robo del reloj de cuco” o “Aquellas maravillosas carteras”. Fue la...
Todo comenzó con un montón de palabras casi ordenadas. Dionisio andaba por el lugar inspirando los más finos y perspicaces balbuceos del elenco. Casi como una conversación, casi ordenados. Sofista1: Esta…mos perdiendog cuuuuota de helenosx. Sofista2: Sip Sofista1: A ver… si ereg capá de congtruí una idea… ¡eres un maestro del conocimiento! Sofista2: ¡Eg maldito Sócrates! Nos está comiendo terre…no. Sofista1: ¡Ereh un maegto! Sofista2: Lo sé. Él no cobra por el conocimiento. Sofista1: Debe…ría…mos unificar criterios… para… Sofista2: ¡Cierto! Criterioz y categoriaz. Sofista1: ¡No hay huevos! Sofista2: ¿¡No hay huevos!? AGUÁNTAME EL ESQUIFO. Y así, queridos amig@s, fue como nació la UFC. Allá por el siglo V A.C los sofistas decidieron unificar criterios con Sócrates a través de la palabra no escrita en el famoso octógono ateniense de La Acrópolis. Octógono y lugar de celebraciones con un fabuloso catering. En ese momento existía un grave problema entre los ...
-Perdona Paco, ¿puedes acercarme mi bolso? Necesito mi bloc de notas. -Claro, una cosa... ¿vas a necesitar algo más de tu bolso? -Pues no lo sé... -Bueno, te lo digo porque la semana pasada, concretamente el lunes, me pediste que bajase la tapa del váter y tres días más tarde me lo volviste a pedir. Para no ir dos veces, ¿sabes? -¿Cómo puedes ser tan cretino? -¡Enseguida saltas a criticarme! Lo único que quiero es optimizar los esfuerzos. -Ya te veo levantando la copa del mundo de los optimizadores. -¿¡Lo ves!? Otra vez. Pero no me extraña, al fin y al cabo vivimos en el país de la crítica. ¿¡Sabes!? Voy a escribir un libro que se va a titular "Críticas de destrucción masiva". -El título es impactante. -Será un best-seller. Y voy a empezar a escribirlo esta misma noche... creo que voy a sentarme en el jardín, aprovechando que hace una noche muy buena. -Fíjate que colores tienen esas luciérnagas. -Preciosas. -Menos mal que compramos luciérnagas de bajo...
Qué guay el fin de Quaid.
ResponderEliminar...Que se anime, a ver si un día vuelve a tiempo y le da vidilla al tintero, que luego se caduca y la pluma no se desliza igual untándola en escupitajos de calamar.