Piratas de la ISO 9001



Un barco con diez hombres armados aborda a otra embarcación de marcha más lenta. El pánico se generaliza y los pasajeros acaban agolpados en el lado menor del triángulo que forma la cubierta.

Cuestiones:
 -Calcula a que hora se cruzan los trenes en el punto B.

Cedric, uno de los pasajeros, ha abusado de los fritos en el último mes y le está empezando a costar trabajo subir las escaleras. Lorena por su parte sigue pensando que si el universo sigue expandiéndose tendrá que comprarse un coche diésel.
El pirata con la barba por las rodillas da un paso al frente para dirgirse a la muchedumbre asustada.

-Estrabón: Tranquilitos todos, soy Estrabón; el corsario más sanguinario de los siete mares. No hagáis ninguna tontería y nadie sufrirá ningún daño físico ni moral. Y hablo totalmente en serio.

-Matilde: Señor... señor... puedo darle mi reloj de oro, es un rolex auténtico... está valorado en más de diez mil euros.

-Estrabón: Jajaja, ¿habéis oído chicos?

(Todos ríen)


¿Acaso no te has fijado en el nombre de mi barco? Lee en voz alta.

Matilde: Modelo 047, ¡oh no! ¡Vienen a por nuestros servicios!

(Todos gritan y se agolpan aún más)

-Estrabón: ¡Rápido! Curriculums vitae al suelo, empezad a leer.

-Lucanor: ¡Jefe! Aquí hay un perito colegiado.

En un gesto de rabia Matilde sacó la escopeta de repetición que tenía en su bolso y apuntó sin ningún tipo de titubeo a la frente de Estrabón.

-Matilde: Soy perito de urbanismo del ayuntamiento, y no voy a permitir que os llevéis ningún tipo de proyecto ni documento oficial.

-Estrabón: Tranquila pequeña, nadie saldrá herido. ¿Verdad?

-Matilde: ¡Tendréis que pagar las tasas y declarar cualquier tipo de obra o instalación que hagáis en ese cascarón que tenéis por barco!

(martillea el arma)

-Estrabón: No hay porque enojarse...

-Matilde: ¡Ese panel sandwich! (dispara a un pirata)

-Lucanor: ¡Está loca jefe! ¿Qué hacemos?

-Matilde: Yo te diré lo que tienes que hacer; pide un permiso de obra y paga las tasas, después contrata a un perito colegiado para que te haga un proyecto de inicio de actividad y por último paga las tasas para que los departamentos pertinentes hagan una inspección de las instalaciones y reza lo que sepas para que te den el visto bueno.


Estrabón, Lucanor y los demás supervivientes sacaron sus armas y se suicidaron. Sin pagar las tasas.



Comentarios

Entradas populares de este blog

A Belén Esteban le cae un objeto de atrezzo en la cara y aparece un tercer rostro.

Receta para un guacamole de 10

Un poco de historia