La misión. Penúltimo episodio.
Ramón L´Argent: Sinceramente no entiendo la naturaleza de los militares, tenéis la cuña de la guerra en vuestros ojos.
Capitán: Son conflictos diferentes, en la guerra pierdes la materia de tu ser, ustedes separan la humanidad del ser humano y la venden en pequeños paquetes con un 3% de interés.
Nunca he matado a nadie, y estoy dispuesto a asesinar para demostrar lo contrario.
Sargento: Están todas las felicitaciones. ¿Qué hacemos?
Capitán: Vaya... el protocolo ha fallado... En la escuela de oficiales solo me enseñaron a seguir el dichoso método. Mil veces propuse una reforma del procedimiento, ¡pero no me escucharon! ¡Loco!, así me llamaban por querer establecer una guía con mayor utilidad y unos uniformes a juego con el color de mis ojos, pero no... No me hicieron caso y ahora nos vemos en esta situación.
Cabo: ¡Capitán! Parece que hay movimiento en las tropas enemigas, el enemigo avanza.
Capitán: ¿Por dónde vienen?
Cabo: Están a unos doscientos metros, no, perdón, cien, no, trescientos, no doscientos cincuenta.
Capitán: Están haciendo su famosa marcha absurda. Necesito inspiración para afrontar la situación... ¿Que haría Sócrates en una situación como esta?
Soldado: Tomarse la cicuta.
Sargento: ¿Nos tomamos la cicuta capitán?
Capitán: ¡No! ¡Qué nadie se suicide sin pagar al banco!
Sargento: ¡Debemos luchar! ¡Hasta el final!
Capitán: Tengo una idea sargento. ¿Ve ese ejército que tiene ahí delante?
Sargento: ¿El de la derecha o el de la izquierda?
Capitán: Que más da, ¿acaso nos importa la política? No venimos a engañar a la gente, venimos a matarlos. ¡Sargento salga ahí fuera y acabe con el enemigo!
Sargento: ¡A sus órdenes!
Señor Gincrispi, su inteligencia, gratifica y espesa nuestro raciocinio en carcajadas…“Son conflictos diferentes, en la guerra pierdes la materia de tu ser, ustedes separan la humanidad del ser humano y la venden en pequeños paquetes con un 3% de interés.”, genial, genial…
ResponderEliminarEstoy dispuesto a la cicuta si ese ejército no avanza.
Un fuerte abrazo y gracias por sus delirios.
(...)Nunca he matado a nadie, y estoy dispuesto a asesinar para demostrar lo contrario.(...)
ResponderEliminarJAJAJAA !! Delirante y ácido, con un toque de humor impecable...Muy bueno!
Besos, Gin!
Muchas gracias a los dos por vuestros generosos comentarios, hacéis que mis ganas de escribir no se extingan. ;)
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